Hoy en Revizo o hablar del sistema de CIRCULACIÓN DE AGUA CALIENTE SANITARIA (ACS) se utiliza para garantizar que el agua caliente esté disponible de forma inmediata en los puntos de consumo (grifos, duchas, etc.) en una vivienda o edificio. Esto se logra mediante la recirculación continua o controlada de este recurso a través de las tuberías. Aquí te explico cómo funciona en términos generales:
Generación del agua caliente
El agua se calienta en un generador que puede ser:
- Caldera (de gas, gasóleo, etc.).
- Termo eléctrico Paneles solares térmicos (en sistemas solares)
- Bomba de calor: Este generador calienta la calienta a la temperatura deseada (normalmente entre 50 y60°C) y la envía a un depósito de acumulación o directamente a las tuberías de distribución.
Distribución del agua caliente
Una red de tuberías distribuye el agua caliente desde el generador hasta los diferentes puntos de consumo. En instalaciones sin recirculación, este recurso no llega inmediatamente cuando se abre un grifo, porque hay agua fría acumulada en las tuberías que debe salir primero. Para solucionar este problema, se utiliza un sistema de recirculación.
Recirculación del agua caliente
Un sistema de circulación de ACS utiliza una *bomba de recirculación* que la mantiene caliente en movimiento continuo por las tuberías, evitando que la que hay en las tuberías se enfríe cuando no hay demanda.
Bucle de recirculación: Las tuberías forman un *circuito cerrado* entre el depósito o caldera y los puntos de uso. El agua caliente que no es utilizada vuelve al depósito o generador para mantenerse a temperatura.
Bomba de recirculación: Es el componente que impulsa el agua caliente a circular por el sistema de tuberías. Esta bomba puede estar funcionando continuamente o activarse en función de la demanda (mediante un termostato o un temporizador).
Ahorro energético y eficiencia
Para evitar el consumo innecesario de energía, algunos sistemas incluyen válvulas y sensores que activan la recirculación solo cuando el agua en las tuberías se enfría demasiado o cuando se prevé un mayor uso de agua caliente (por ejemplo, en horarios específicos)
Válvulas de retención
En sistemas de recirculación, se utilizan *válvulas de retención* para evitar que este recurso regrese al generador o depósito cuando no debe. Esto garantiza que siempre haya agua caliente lista en los puntos de consumo.
Problemas de no contar con un sistema de recirculación de agua caliente sanitaria
En un sistema tradicional de suministro de agua caliente sanitaria (ACS) sin recirculación, cada vez que se abre un grifo se genera una espera hasta que el agua caliente llega a la salida. Este proceso no solo resulta incómodo para los usuarios, sino que también presenta varios inconvenientes:
- Pérdida de tiempo y confort: El tiempo de espera para que el agua se caliente puede ser significativo, dependiendo de la distancia entre la caldera o el calentador y el punto de consumo.
- Desperdicio de agua: Al esperar que el agua se caliente, una cantidad considerable de agua fría se desperdicia, lo que incrementa el consumo de agua y los costos asociados.
- Mayor consumo energético: La energía necesaria para calentar el agua que se desperdicia en el proceso también aumenta, lo que repercute en el consumo energético de la vivienda o la instalación.
- Problemas de presión: En sistemas sin recirculación, puede haber problemas de presión en las tuberías, especialmente en instalaciones grandes o con múltiples pisos.
Ventajas de tener un sistema de recirculación de agua caliente sanitaria
Contar con un sistema de recirculación de ACS ofrece numerosos beneficios, tanto en confort como en eficiencia:
- Disponibilidad inmediata de agua caliente: Con la recirculación, el está siempre disponible en las tuberías, lo que elimina el tiempo de espera y mejora la experiencia del usuario.
- Ahorro de agua: Al reducir el desperdicio de agua fría, se contribuye significativamente al ahorro de este recurso, beneficiando tanto el bolsillo como el medio ambiente.
- Mayor eficiencia energética: Aunque el sistema de recirculación consume energía, el ahorro en agua y la reducción de ciclos de calentamiento compensan con creces el consumo adicional, sobre todo si se utilizan bombas eficientes.
- Confort y calidad de vida: Tenerla de inmediato aporta un plus de confort, lo que puede ser especialmente relevante en hogares grandes o en edificios de varios pisos.
- Mejor balance de presión en las tuberías: La recirculación mantiene un flujo constante y equilibrado en el sistema, lo que ayuda a prevenir caídas de presión.